Desde hace años que el pastel de zanahoria es uno de mis postres favoritos, pero la mejor parte de de esto es que puedes disfrutar de muchísimos postres que tienen casi el mismo sabor y te vamos a pasar la mejor receta. ¿Tienes zanahoria y avena? Prepara un delicioso postre sin horno ni azúcar con esta receta.
La zanahoria es una hortaliza bastante dulce y resulta perfecto para preparar postres dulces sin la necesidad de utilizar azúcar y esta receta es tan fácil que no lleva azúcar ni horno, aun así queda perfecta como colación.
Consejos para preparar tu avena estilo pastel de zanahoria
Ralla la zanahoria o hazla en bastones muy finitos.
Escoge ingredientes frescos para que la zanahoria tenga un sabor dulce.
Utiliza canela molida de Saigón, tiene un sabor espectacular que otras canelas en polvo no ofrecen.
Esta receta no lleva azúcar, porque por sí misma la zanahoria ya tiene, pero puedes tostar las nueces con mantequilla y azúcar.
Puedes ocupar otras semillas además de la nuez para coronar la avena.
Esta avena puedes prepararla con agua, leche o bebidas vegetales.
Beneficios de las zanahorias
Las zanahorias son un tubérculo importante, rico en compuestos bioactivos naturales, que son reconocidos por sus efectos nutracéuticos y beneficios para la salud.
Es rica en varios nutrientes como Vitamina A y Carotenoides.
Son una fuente de minerales como potasio, fósforo, magnesio, yodo y calcio.
También contiene Vitamina B3 (niacina), Vitamina E y K y folatos.
La vitamina A y los carotenoides actúan en el organismo de diversas formas, el betacaroteno actúa como compuesto antioxidante que se transforma en vitamina A, a la cual también se le conoce como retinol, la cual ayuda a promover el buen funcionamiento de la retina humana, misma que nos ayuda a ver mejor cuando hay poca luz.
Al ser una verdura con alto contenido en agua es una buena fuente de fibra, también está científicamente comprobado que la zanahoria es capaz de aumentar la producción de saliva y los jugos gástricos que intervienen en el proceso de la digestión.
Hierve el agua en una cacerola con la avena. Cocina la avena hasta que comiencen a espesar, aproximadamente 10 minutos; agrega la manzana, la zanahoria, las pasas, la canela, la nuez moscada y el jengibre.
Deja que la avena hierva a fuego lento hasta que esté suave, aproximadamente 20 minutos más.
Derrite la mantequilla en un sartén a fuego medio-bajo y agrega las nueces y tuesta hasta que estén ligeramente doradas, de 2 a 5 minutos. Espolvorea con canela y revuelve hasta que la canela se derrita y cubra las nueces. Puedes agregar endulzante opcional.
Sirve la avena cubriendo cada plato con aproximadamente 2 cucharadas de la mezcla de nueces y 2 cucharadas de yogurt.
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