¿A quién no le gusta salir al jardín y tomar una naranja, una manzana, guayaba o limón de tu árbol frutal? Es la forma económica y sustentable de obtener nuestros propios alimentos, pero casi nadie nos dice que hay ciertos árboles que definitivamente no se recomienda tener en casa, y nosotros hoy te explicamos porqué.
Estos son los 4 árboles frutales que no debes tener en tu huerto casero o jardín si no quieres tener problemas en tu casa o jardín. ¡Toma nota!
4 árboles frutales que no debes tener en tu huerto casero o jardín
Árbol de granada
Las granadas son unas frutas frescas de temporada que a muchos les encantan, y aunque son fáciles de cuidar necesitan mucho espacio para poder tener un árbol frondoso y lleno de granadas. El mayor "pero" se le achaca sobre todo por sus raíces que se van a extender por el terreno para lograr captar la mayor cantidad de nutrientes, además este árbol suele crecer mucho y hacia todos los lados, por lo que deberás estar podando constantemente sus ramas y hojas. Ademas, si sus raíces se abren paso con fiereza, pueden botar el suelo, intervenir en tuberías o estructuras.
Árbol manzanilla de la arena y Manzanilla de playa
A este árbol también se le conoce como árbol de la muerte, porque de pies a cabeza representa un riesgo incluso sus frutos. Su savia lechosa contiene el potente irritante de forbol, el contacto con sus hojas puede dejar la piel escaldada.
La quema de la madera de este árbol puede cegar temporalmente y causarte serios problemas respiratorios debido a su humo. Pese a que su fruta puede saber agradablemente dulce, después de unos instantes produce un sabor picante que pasa a una sensación de ardor y desgarro, y una opresión en la garganta.
"La manzanilla tiene el aroma y apariencia de una manzana inglesa, pero pequeña, crece en árboles grandes, generalmente a lo largo de la costa marítima. Están repletas de veneno. Me han dicho que una sola manzana es suficiente para matar a 20 personas"
Lo anterior se sabe gracias a los diarios de Nicholas Cresswell, sobre sus días en las colonias británicas en América.
Árbol de higo
Los higos son frutos deliciosos que no tienen comparación. Sin embargo, es un árbol que puede resultar bastante sucio, ya que durante el otoño e invierno se caen las hojas y los frutos que no se recogieron previamente. Aunque esto puede ser un festín para las abejas, para nosotros puede significar un árbol de alto mantenimiento.
A la higera como también se le conoce, hay que podarla constantemente porque sus ramas se extienden demasiado, lo que podría obstruir el espacio de otros árboles frutales. Otro de los dolores de cabeza que provoca este precioso árbol frutal es que las raíces son invasivas, tanto que pueden romper fácilmente el suelo hecho de hormigón así como las tuberías.
Por ello, se recomienda ubicarla lo más lejos posible, a una distancia mínima de 10 metros de cualquier construcción.
Árbol de mamey
Aunque el mamey es un fruto delicioso que se considera un oro mexicano, este árbol frutal tiene el mismo problema que la higuera; puede perforar suelos y tuberías aunque la superficie esté hecha de hormigón. Sus raíces se extienden tanto que pueden abarcar varios metros a lo largo y ancho de la tierra. Ademas de ser un árbol de copa escandalosa.
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