Esta receta te permitirá preparar 1 litro de salsa de chile manzano perfecta para acompañar tacos, antojitos y todo tipo de platillos mexicanos. Así que, con solo unos ingredientes y pasos sencillos, podrás disfrutar de una salsa picante, aromática y llena de sabor en poco tiempo.
Si tienes una reunión con amigos o comida familiar próximamente, esta receta te va a salvar porque tiene todo para ser un éxito y conquitar los paladares de tus invitados, pues no solo se puede comer con tacos, también es perfecta pasa sopes, tlacoyos, pambazos, quesadillas y demás antojitos.
Consejos para preparar la mejor salsa verde de salsa de chile manzano
- Elige chiles manzanos frescos, de buena calidad y sin manchas. La cantidad de chiles dependerá de tu gusto por el picante. Puedes usar chiles verdes, amarillos o rojos para darle un toque de color a tu salsa.
- Utiliza tomatillos verdes de cáscara firme y color verde intenso. Evita usar tomatillos que estén maduros o blandos, ya que pueden afectar el sabor de la salsa.
- Una cebolla blanca mediana es suficiente para darle sabor a la salsa. Puedes usar también cebolla morada o roja para un toque diferente.
- Un manojo de cilantro fresco es esencial para darle a la salsa ese sabor característico. Puedes usar también perejil o culantro si lo prefieres.
- Una pizca de azúcar ayuda a equilibrar la acidez de los tomatillos y el picante de los chiles.
- Puedes usar una licuadora de inmersión para licuar los ingredientes directamente en la olla donde has cocido los tomatillos, lo que te ahorrará tiempo y esfuerzo.
- Si quieres una salsa más picante, puedes agregar algunos chiles jalapeños o habaneros a la licuadora.
- Puedes agregar otras verduras a la salsa, como chile poblano o pimiento verde.
- La salsa verde de chile manzano se conserva bien en el refrigerador hasta por una semana.
5 datos curiosos sobre el chile manzano que quizás no conocías
El chile es un ingrediente fundamental y emblemático en la dieta de los mexicanos, considerado como el primer cultivo domesticado en el continente americano.
- El chile manzano tiene una larga historia que se remonta a la época prehispánica. Se cree que fue domesticado en México y Centroamérica hace más de 6.000 años, convirtiéndolo en uno de los chiles más antiguos del mundo.
- A diferencia de muchos chiles que solo maduran en un color, el chile manzano puede presentar una variedad de colores durante su maduración como verde, amarillo, naranja y rojo. Cada color aporta un sabor y aroma ligeramente diferente.
- El chile manzano es conocido por su gran resistencia a climas fríos y de gran altitud, lo que le permite prosperar en zonas montañosas donde otros chiles no sobreviven. De hecho, se cultiva exitosamente en altitudes de hasta 3.000 metros sobre el nivel del mar.
- El chile manzano posee un nivel de picante que varía de medio a alto, lo que lo convierte en un ingrediente ideal para salsas, adobos y guisos. Sin embargo, también se puede disfrutar fresco, asado o en escabeche.
- Además de su sabor y aroma, el chile manzano también tiene propiedades medicinales que han sido valoradas desde la época precolombina. Se le atribuyen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y digestivas, entre otras.
Ingredientes
- 100 gramos de chile manzano
- 1 kilo de tomatillos verdes
- 1/2 pieza de cebolla blanca
- 2 dientes de ajo
- 1 ramitas de cilantro fresco desinfectado
- Sal al gusto
- 1/2 cucharadita de azúcar moreno
- 1/2 cucharadita de orégano seco
- 1/4 de cucharadita de comino molido
- Pimienta negra molida al gusto
Cómo hacer 1 litro de salsa verde de chile manzano con tomatillos para tacos, antojitos y más delicias mexicanas
- Tiempo total 30 m
- Elaboración 15 m
- Cocción 15 m
- Retira los tallos y las semillas del chile manzano. Si lo deseas, puedes dejar algunos chiles con semillas para obtener una salsa más picante.
- Asa los chiles manzano en un comal, sartén o directamente sobre la flama de la estufa. Asegúrate de que los chiles se doren uniformemente por todos lados hasta que la piel se ampolle y se torne negra.
- Asa los tomatillos y colócalos en un comal o sartén y ásalos hasta que la piel se ampolle y se torne negra.
- Pica la cebolla en trozos grandes y el ajo en mitades. Ásalos junto con los chiles y tomatillos hasta que estén ligeramente dorados.
- Coloca los chiles manzanos asados, los tomatillos asados, la cebolla asada, el ajo asado, el cilantro fresco, la sal, el azúcar, el orégano seco, el comino molido y la pimienta molida en una licuadora. Licúa hasta obtener una salsa homogénea.
- Si deseas una salsa más suave, puedes pasarla por un colador fino para eliminar las semillas y trozos de piel.
- Agrega más sal, azúcar, orégano, comino o pimienta molida al gusto.
- Sirve la salsa caliente o a temperatura ambiente con tus tacos, antojitos, sopes, quesadillas o cualquier platillo mexicano que te guste.
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