Por qué en algunos países se sirve siempre agua cuando se compra un café en un restaurante

¿Quién no disfruta de pedirse un cafecito fuera de casa para descubrir nuevos sabores o complementos que descubrimos que podemos preparar en casa? Nosotros sí, y siempre que se da la oportunidad pedimos un café en algún restaurante, pero eso nos hizo notar que en algunos lugares y países se sirve siempre agua cuando se compra un café. ¿Por qué pasa esto?

Resulta que esta práctica es muy común en los cafés varias partes del mundo para seguir la costumbre de Italia, un lugar reconocido por el auge del café expreso. En el mundo de las cafeterías y restaurantes, se defiende que el agua forma parte de la degustación del café.

¿Por qué en algunos países se sirve siempre agua cuando se compra un café?

Al menos alguna vez en la vida te ha pasado que pides una taza de café americano, espresso, doble, capuchino o de variedades que tengan una buena cantidad de cafeína, y a la hora de la hora te traen tu café con un vaso de agua sin haberlo pedido. Es una curiosidad que ocurre en varios lados del mundo y te decimos la razón.

Aparentemente, ofrecer un vaso de agua con una taza de café tiene varios propósitos, tales como:

• Limpiar el paladar antes de tomar el primer trago de café.

• Ayuda a hidratar la boca

• Disminuye el amargor y prepara las papilas gustativas para degustar el sabor del café lo más puro posible.

Eso sí, beber el agua debe ser antes de toar el primer sorbo de café para que funcione el propósito de limpiar el paladar.

Costumbres de Italia que llegaron hasta tu cafetería local

El acompañamiento del vaso de agua surgió en Italia y se extendió por varios países del mundo, aunque no en todos los establecimientos; usualmente es más popular en cafeterías especializadas en variedades de granos de café, tipos de tostado, molienda y todo lo que involucra la industria cafetalera.

Se recomienda tomar el agua antes que el café para eliminar los restos de partículas de otros alimentos que pueden alterar el sabor original. Así puedes disfrutar de los pequeños matices que hacen toda la diferencia en una taza de café y tienes la experiencia completa de sabor.

La hipótesis más antigua dice que era una ley en Viena

De acuerdo con el sitio web 7P Aperitivo, otra hipótesis advierte que el Imperio Austrohúngaro del siglo XIX implementó esta costumbre, pero con un propósito diferente. Cuando la nobleza vienesa no sabía qué hacer con la pequeña cuchara de café después de remover el café, este comenzó a servirse con un pequeño vaso de agua a un lado para dejar la cuchara sucia dentro.

Sin embargo, en ese momento, el agua potable estaba tan sucia que preferían limpiar el vaso rápidamente. De este modo, la nobleza invirtió en un sistema de tratamiento de agua, convirtiendo a Viena en el primer lugar para hacer cumplir una ley particular: solo las cafeterías vienesas podían ofrecer agua clara y pura.

Así Viena se convirtió en la primera ciudad del "viejo mundo" que tenía agua limpia y potable, y de paso internalizó su costumbre de ofrecer un vaso de agua con café en 1973 hacia muchos países europeos que asistieron a la Exposición Universal de Austria, que decidieron llevarla a sus cafeterías locales.

El propósito inicial era que el vaso de agua tendría la cuchara dentro, pero se adoptó por la población para mostrar que el agua utilizada para hacer el café en cada establecimiento, era agua limpia y potable.

En Directo al Paladar México también puedes leer ¿Ganas de un cafecito? Así son los cafés típicos de cada país