En México tenemos la suerte de tener una gran variedad de productos elaborados en las panaderías tradicionales, y la mayoría de las familias los consume al menos una vez a la semana, sean dulces o salados. Pero sucede, que son tan ricos los panes elaborados en México, que no únicamente nos llevamos a casa la cantidad que consumiremos en ese día, y seguro llevamos algunas piezas extras, para cumplir el antojo.
Para evitar que esas piezas se nos estropeen, hoy les compartimos algunos consejos para almacenar correctamente el pan, pues aunque no hay reglas claras referente a dónde y cómo deben ser guardados, todos sabemos que para mantenerlo fresco lo debemos colocar en un contenedor cerrado, seco y con poco aire.
Esperar a que se enfríe
Si llevamos el pan a casa desde una panadería, es probable que cuando lleguemos ya se haya enfriado, pero si no, o si lo hemos hecho en casa, debemos recordar que el pan caliente no se debe poner en ningún recipiente cerrado hasta que se enfríe, pues el calor formaría una capa de humedad, principal causante de la formación de moho.
También hay que tener en cuenta que un poco de aire no es ninguna preocupación al momento de guardar el pan, sin embargo hay que evitar que haya aire en exceso, pues ello provoca que el pan se seque.
¿Qué opciones tenemos?
Actualmente hay muchas opciones para almacenar el pan, y la opción que elijamos debe depender más de la frescura y las ventajas que del estilo. Muchos por ejemplo, tenemos la costumbre de conservarlo en una bolsa en el mostrador de la cocina, lo cual puede dar una apariencia de desorden, lo cual se resuelve usando una caja para pan y ubicándola, en nuestra misma cocina, pero lejos del espacio principal en el que cocinamos.
Pero cuidado, que aunque la idea de colocar la panera encima del refrigerador es tentadora, tenemos que tener en cuenta que dicha parte del refrigerador suele ser caliente, y haría que nuestro pan se seque más rápido, o causar una condensación en la bolsa o la panera. Esta opción solo debe utilizarse en corto plazo y como último recurso.
Profundizando un poco en el tema de las cajas para pan o paneras, éstas son aún tan populares como lo fueron hace muchos años, con la diferencia de que ahora hay una mayor variedad de estilos, tamaños y acabados.
Al elegirla, debemos considerar el lugar donde la ubicaremos y el espacio que ocupara en éste, además de buscar que esté fabricada en materiales que ofrezcan durabilidad, pues es un utensilio que seguramente se ocupará más de una vez al día. Además, su diseño es importante, pues de ello depende no sólo qué panes podremos guardar, sino también si podremos colocar o no otros objetos encima.
Si está en nuestras posibilidades y tenemos la fortuna de encontrar una caja de acrílico expandible será nuestra mejor opción, pues éste tipo de paneras proporcionan un gran espacio de almacenamiento para el pan casero. La ventaja, es que ajusta al tamaño del pan que hemos horneado o a sus unidades.
¿Y tú, cómo almacenas el pan? Imagen | Pixabay
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