Sí, así tal y como lo leíste. Existe el chocolate caliente con queso y se trata de una una bebida tradicional de Colombia. En realidad es algo tan simple y sencillo (pero al mismo tiempo que suena extraño) como una preparación de chocolate caliente con trozos de queso sumergidos que se derriten y gratinan con el mismo calor del chocolate, dejando un gusto irresistible de dulce combinado con salado que a muchos nos encanta.
Aunque seguro más de una persona puede ver esto y rechazar la idea inmediatamente; pero bien decía mi mamá que "No puedes saber que algo no te gusta, hasta que lo pruebes" y esta receta tradicional encaja a la perfección con esa idea.
Esta bebida se suele tomar en las ciudades frías, como en Bogotá, a la hora del desayuno (tal y como en México lo hacemos con atole) junto con unos huevos pericos, que son lo que nosotros conocemos como huevos a la mexicana, pero sin chile, y un poco de pan. Un desayuno completamente tradicional y típico de Colombia.
Lo ideal es que lo prepares con un queso cremoso, pero firme, y que se derrita fácilmente. En Colombia lo preparan con un queso doble crema de sello colombiano, que tiene esta característica específica, pero también lo podemos preparar con queso mozzarella sin problemas.
Si eres una de esas personas super abiertas de mente y que te gusta salir de tu zona de confort para probar nuevos sabores, nuevas texturas y viajar por el mundo sin salir de casa, esta es tu oportunidad de preparar este chocolate caliente con queso en casa. Perfecto para quitarte el frío de otoño.
Ingredientes
- Leche (4 tazas)
- Chocolate de mesa (chocolate oscuro o chocolate colombiano, si se consigue) 100
- Raja de canela 1
- Clavos de olor 5
- Azúcar (2 cucharadas)
- Queso mozzarella , queso doble crema colombiano o queso oaxaca 300 g
Cómo hacer Chocolate caliente con queso
- Tiempo total
En una olla, calentamos la leche a fuego medio.
Cuando la leche comience a calentarse, agregamos la tableta de chocolate (que previamente cortaremos en trozos pequeños) y la mezclamos con las especias. Removemos bien para que el chocolate se derrita y se integre con la leche. Endulza a tu gusto.
Si tienes un molinillo, puedes utilizarlo para batir el chocolate y que forme espuma. En caso de no tenerlo, puedes hacerlo con una espumadora o hasta en la misma licuadora (claro, cuando esté un poco más frío)
Toma cuatro tazas y al fondo de cada una ellas pon un trozo generoso del queso que hayas escogido. Sirve el chocolate muy caliente, para que el queso comience a derretirse.
¡A disfrutar! Puedes tomarlo en la mañana o a media tarde con un poco de pan de dulce.
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