¿Te puedes contagiar al sentarte en un baño público?

Creo que todos hemos pasado por el temor de contraer una enfermedad si nos sentamos en un baño público, yo especialmente soy demasiado especial en ese tema. Así que me llamo la atención encontrarme con varios artículos que hablan específicamente sobre este tema: ¿Te puedes contagiar al sentarte en un baño público?

Es cierto que los baños tienen el ambiente perfecto para que las bacterias se desarrollen: humedad, oscuridad y nutrientes. Es probable que en los baños públicos podamos encontrar bacterias como estreptococo, estafilococo, E. coli y Shigella, y virus como el de la hepatitis A, el virus del resfriado común, y varios organismos de transmisión sexual.Pero al parecer, la probabilidad de contraer una enfermedad al sentarte en un inodoro es bastante baja, sobre todo cuando contamos con un sistema inmunológico saludable.

La mayoría de los organismos que causan enfermedades, no pueden sobrevivir en la superficie del asiento del inodoro por mucho tiempo, y para que se produzca una infección, tendrías que tener un corte o una herida abierta que entre en contacto directo con el asiento; que es posible, pero muy poco probable. Esto incluye infecciones de transmisión sexual como la clamidia o la gonorrea, que sólo se pueden transmitir a través de fluidos corporales.

En un asiento de inodoro, es posible encontrar cerca de 8 bacterias por centímetro cuadrado. Sin embargo hay superficies mucho más contaminadas, por ejemplo una esponja de cocina tiene alrededor de un millón quinientos cincuenta bacterias por centímetro cuadrado. Así que la esponja de tu cocina es 200,000 veces más sucia que un asiento de inodoro.

La manera más eficaz para reducir al mínimo la transmisión de enfermedades en los baños públicos, es lavarse las manos con agua y jabón. Y aunque la mayoría de las personas reportan que siempre se lavan las manos después de ir al baño, se ha observado que sólo el 67% de las personas realmente lo hacen. Para eliminar cualquier rastro de microorganismos, debes de frotar agua jabonosa en toda la mano y los dedos, incluyendo debajo de las uñas, durante 20 a 30 segundos. La fricción ayuda a deprender las partículas causantes de enfermedades.

Eso sí, en un estudio publicado en la revista científica Applied and Environmental Microbiology, se encontró que es mucho más fácil enfermarse al respirar las bacterias que se encuentran en las gotas de agua al momento de jalarle al escusado. La mayor dispersión de estas partículas no se produce en los momentos iniciales de la descarga, sino cuando la mayor parte del agua ha dejado la taza.

Así que ya sabes, lávate las manos con agua y jabón, y antes de jalarle al escudado, asegúrate que la tapa este abajo.

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