Burritos de frijol y huevo. Receta para el regreso a clases

Todos recordamos con cierto cariño aquellos días en los que nos saltábamos el desayuno, o almorzábamos rápidamente entre clases, y quizá con cierta nostalgia aquellos días en los que por mil razones pasábamos largas horas sin probar bocado. Si bien es cierto, son recuerdos entrañables, pero también son hábitos poco saludables que merman nuestra salud.

Así que, aprovechando que el regreso a clases está a tan sólo unos días, he querido compartir con ustedes esta receta de burritos de frijol y huevo, que podemos preparar con anticipación, refrigerarlos, y calentarlos rápidamente en un horno de microondas antes de comenzar la jornada.

Ingredientes para 2 personas

• 1/2 taza de frijoles refritos, 100 gramos de queso Oaxaca, 2 huevos, 1/4 de cebolla, salsa roja o verde, 4 tortillas de harina, 1 cucharada de mantequilla.

Cómo hacer burritos de frijol y huevo

Lo primero que haremos es preparar unos huevos revueltos, para ello, freímos la cebolla finamente picada en una sartén caliente, agregamos los huevos previamente batidos y sazonamos con sal y pimienta. Cocinamos moviendo constantemente hasta que estén cocidos.

Calentamos las tortillas de harina unos segundos para suavizarlas, y en cada una de ellas colocamos en el centro un poco de quesillo deshebrado, dos cucharadas de frijoles refritos, 2 cucharadas de huevos revueltos y unas gotitas de salsa fresca.

A continuación, damos forma a los burritos, procurando que queden bien cerrados. Para ello, doblamos un poco los extremos y enrollamos, para luego dorarlos en una sartén untada con mantequilla.

Degustación

Desde luego, estos burritos de frijol y huevo saben mejor si se comen calientes, pero no saben mal si se comen fríos. Si se comen calientes, disfrutaremos del queso derretido que a todos gusta. Está hecho a base de alimentos ricos en nutrientes que nos ayudarán a empezar el día con mucha energía.

Por cierto, no olviden acompañar su desayuno con una porción de fruta, ya sea un plátano, unas fresas, un jugo de naranja o incluso unas guayabas. No les hará ningún daño, y les alegrará la mañana.