Si hay una aplicación para móvil que agrada a todos los amantes de la cocina y la gastronomía, esa sin duda es Instagram, y tengo que confesar que me cuento entre los muchos usuarios de la aplicación. Allí, es donde he encontrado un perfil bajo el pseudónimo de Chef Jacques La Merde, en donde el usuario, publica fotos de comida chatarra emplatada como si fueran servidas en un fino restaurante.
En sus imágenes, podemos ver algunas de las características que distinguen a la presentación de platillos de esta naturaleza: platos grandes, porciones pequeñas y un poco de salsas y aderezos aquí y allá; pero lo que lo hace raro es el elemento principal, que siempre es algún clásico de la comida chatarra.
Así, por ejemplo, encontramos la imagen que encabeza esta nota, con un pastelillo de chocolate relleno y glaseado -mejor conocidos como Pingüinos Marinela, aquí en México- acompañado de chispas de yogur, perlas de chocolate y hojas de menta. O el de la imagen sobre este párrafo, en donde ha emplatado unas lonchas de embutido de puerco, chicharrones, láminas finas de rábano, chile verde y queso cheddar.
Quien está detrás de este perfil de Instagram nos hace reflexionar de dos formas distintas. Primero, haciendo una sátira sobre la calidad de los alimentos que se sirven en muchos restaurantes a un precio ridículamente alto. Por otro lado, también nos demuestra que incluso la comida sencilla puede verse espectacular si tenemos cuidado en su presentación.
Vía | @chefjacqueslamerde
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