Historia del vino tinto en México y qué beneficios tiene para la salud un consumo moderado

El vino es una de la bebidas mas consumidas y mas antiguas en la historia de la humanidad, en México el vino tiene una tradición que cuenta con más de 500 años, se dice que los primeros vinos mexicanos surgieron durante la época de la conquista.

Un poco de historia

Hernan Cortés junto con sus hombres habían traído un gran cargamento de vino español, sin embargo, cuando este se terminó tuvieron la necesidad de reponer sus suministros, ya que este era un factor de gran importancia para la misa religiosa, por lo que ordenó que por cada 100 indígenas se plantaran 1000 viñas.

Inicios del vino mexicano en Coahuila.

Durante esta época los jesuitas, Jerónimo Ramírez, Francisco de Arista y Juan Agustín de Espinosa fundan Santa Maria de Parras en el Valle de Parras, Coahuila, donde encontraron un ecosistema ideal para la siembra de la uva; en 1597 le fue otorgado a Lorenzo García el permiso Real y los derechos de las tierras para la plantación de vides y la elaboración de vino, fundando así la Hacienda San Lorenzo, primera casa vinícola en la Nueva España, la cual en 1893 de la mano de Evaristo Madero cambiaría de nombre a lo que ahora conocemos como Casa Madero.

Estas primeras cosechas de vino mexicano resultaron tan buenas que el Rey ordenó a todos los barcos que viajaban a la Nueva España del viejo continente llevar viñas y uvas para acelerar la producción, sin embargo, cuando el comercio de vino español cayó en contra del vecino vino francés, Felipe II de España, con el fin de proteger los ingresos de los vinos españoles, ordenó el fin de toda la producción vinícola mexicana.

Un poco de la historia de la producción vinícola en Baja California.

La prohibición al vino por parte de la Corona Española no pudo parar totalmente la producción realizada en la Nueva España, ya que pronto las iglesias la retomaron para producir sus propios vinos con propósitos religiosos; un sacerdote jesuita llamado Juan Jugarte fue el primero en establecer una misión vinícola en Baja California llamada Santo Tomás; los dominicos por su parte se establecieron en el Valle de Guadalupe, hoy centro de la industria vitivinícola mexicana.

Después de la Guerra de Reforma de 1857, estas posesiones religiosas como la misión Santo Tomás, fueron asumidas por el Estado y vendidas más adelante a un grupo de inversionistas naciendo así la actual Casa Santo Tomás.

La tecnología llega a la industria vitivinícola mexicana.

La llegada a México del ferrocarril en 1890, marca un cambio en la vinicultura del país, gracias a que las uvas podían ser transportadas con las necesidades de refrigeración óptimas para que se pudiera mantener la calidad y así producir el vino en otras regiones, en donde no podían ser cultivadas.

Modernidad

Hacia 1900, gran parte de los viñedos mexicanos quedó destruida por la filoxera y los problemas políticos que sufría el país; en 1948 fue creada la Asociación Nacional de Vitivinicultores, que afilió inicialmente a quince empresas, y seis años más tarde, esta asociación ya había duplicado sus afiliados.

La producción moderna de vino en México comenzó en la década de 1980 debido al cierre de las fronteras a los vinos extranjeros por lo que se tuvo que aplicar técnicas modernas de producción y utilizar uvas de origen francés o español.

Beneficios para nuestra salud

Según los investigadores el vino tiene beneficios médicos como efectos antioxidantes, antiinflamatorios y reguladores de lípidos, todo esto gracias a la uva de la que están hechos, se ha encontrado que la cáscara de la uva roja es una fuente de resveratrol, un potente antioxidante natural que reduce el estrés oxidativo del cuerpo, el cual esta íntimamente ligado con enfermedades como el cáncer y algunos padecimientos cardíacos.

Salud cardiovascular

Estudios muestran que tomar vino tinto moderadamente está relacionado con un riesgo más bajo de la enfermedad cardíaca coronaria. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos, beber moderadamente se define como:

• 1 copa de vino al día para las mujeres
• 2 copas de vino para los hombres

*Una copa de vino son 5 onzas (oz) de 12% de alcohol.

Salud intestinal

Los polifenoles contenidos en las uvas con las que se hace el vino tinto pueden mejorar la microbiota intestinal, gracias a que estos pueden actuar como prebióticos, los cuales son compuestos que fomentan la bacteria intestinal saludable.

Diabetes tipo 2

En un estudio realizado por la Fundación Europea para el Estudio de la Diabetes, se concluyó que tomar una copa de vino tinto para la cena puede disminuir moderadamente el riesgo cardiometabólico en las personas con diabetes tipo 2.

Presión arterial

El resveratrol puede reducir la presión arterial e incrementar los niveles de colesterol bueno (HDL) según estudios de la Asociación Americana del Corazón (AHA).

Cancer

Investigaciones han demostrado que el resveratrol tiene efectos protectores contra el cáncer gracias a que este puede evitar la proliferación de células cancerígenas e inhibir la metástasis.

Demencia

Se ha identificado que las personas que se abstienen de tomar vino pueden presentar mayor riesgo de demencia debido a los efectos neuroprotectores de los polifenoles y otros compuestos del vino que pueden reducir la inflamación y alterar el perfil de lípidos en el cuerpo.

Depresión

Un estudio realizado con 5,505 personas durante 7 años demostró que aquellas personas que tomaban entre 2 y 7 copas de vino a la semana tenían niveles más bajos de depresión, en contra parte, las personas que tomaban en exceso tenían un mayor riesgo de sufrir depresión.

Perdida de la visión

Al reducir la inflamación y el estrés oxidativo, el resveratrol, contenido en el vino tinto, puede ayudar a contrarrestar la perdida de visión por consecuencia de la edad.

Daño hepático

A pesar de que el alcohol es una de las principales causas de lesiones hepáticas, se ha demostrado que un consumo moderado de vino tinto se relaciona con menor fibrosis hepática en las personas con la enfermedad del hígado graso no alcohólico.

Contraidicaciones

A pesar de que el vino tinto puede tener diferentes beneficios para la salud si se toma moderadamente los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos, indican que 1 de cada 10 muertes entre los adultos de 20 a 64 años de edad se relacionaron con el consumo excesivo de bebidas alcohólicas.

Esta institución de la salud afirma que algunos de los riesgos del uso excesivo de alcohol incluyen:

• Problemas cardíacos
• Accidentes cerebrovasculares
• Enfermedad del hígado graso
• Trastornos de salud mental
• Ciertos tipos de cáncer
• Pancreatitis

Lo que no cabe duda es que no importa si es mexicano o extranjero, el vino tinto es delicioso y es por eso que es uno de los mas consumidos en la actualidad principalmente en eventos sociales y como acompañamiento de los alimentos diarios.

Fotos | Pexels | Santo Tomas.com |

Fuentes | Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural | Gobierno de México | Medical News Today | Revista Muy Interesante | The Centers for Disease Control and Prevention | Mexico Ideas |