En estos días en los que vamos de susto en susto, que si hay un sismo, que si alerta de tsunami, que si nuevo virus, y todas estas cuestiones apocalípticas que nos tienen con el estrés al máximo, seguro te han dicho “Cómete un pan para el susto”, pero en realidad ¿qué tan cierto es? Hoy, una experta lo explica, en nuestra sección derribando mitos.
Dentro de las tradiciones mexicanas que se han heredado de generación en generación está dicha creencia, seguro te suena familiar eso de “cómete un pan para el susto”, he hecho, cada que tiembla en México, este dicho es parte de los memes y de las conversaciones populares.
Sin embargo, según la nutrióloga Alejandra Argüello, especialista en reducción de peso, control de triglicéridos y colesterol, diabetes e hipertensión, asegura que no está comprobado que este alimento beneficie al cuerpo humano, tras haber estado en una situación de miedo o susto.
“Yo no lo asociaría, no tiene nada que ver, son creencias de la gente, pero no hay una explicación lógica de que eso pueda funcionar. Más que nada es el estado emocional, hay que mantener la calma, hidratarte, tomar agua; como en ese momento estamos en una situación de estrés el cuerpo sí necesita hidratarse más”.
Por otra parte, en el caso de las personas que sufran de presión baja, sí podrían tomar algún alimento para estabilizarse.
“Si a la persona se le bajó la presión, sí habría que auxiliarlo, darle algún jugo de naranja”, recomienda la experta en nutrición.
Por otro lado, la nutrióloga Alejandra Argüello dijo que lo que sí hay que evitar es consumir alimentos altos en azúcar, para no alterar de más los niveles de glucosa. Pero que sí hay que comer algo saludable, para que el estómago no resienta el incremento de la secreción de jugos gástricos que se tiene cuando el cuerpo es sometido a estrés.
El dicho de que hay que comer pan, tras un susto, podría tener que ver con el gusto, tradición y alto consumo que la población mexicana tiene, pues en una encuesta que realizó la Procuraduría Federal del Consumidor, en 2017, donde cuestionó a mil 635 personas, acerca de si consumen al menos una vez a la semana pan dulce tradicional o recién hecho, el 96.7 por ciento respondió que sí.
Mientras que, al cuestionar sobre las razones de su ingesta de pan, el 53.7 por ciento, respondió que, por gusto a su sabor, textura, olor y las características del pan; el 14.2 por ciento dijo que por tradición o costumbre; el resto de contestaciones se dividieron en varias razones, como antojos, para acompañar sus bebidas, como postre, porque es económico, etc.
Así que, el mito de que hay que comer un pan, tras un susto, es falso. Al menos, pensando en que pudiera aportar algún beneficio especial.
Fuentes | Nutrióloga Alejandra Argüello | Profeco |
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