Cómo preparar sidra casera y cuáles son los diferentes tipos de esta bebida que se consume en temporada navideña

Una bebida muy tradicional de las fiestas decembrinas, es la sidra, esta bebida ligeramente alcohólica que a muchos gusta y que se utiliza generalmente para brindar en lugar de utilizar un vino espumoso, ya que es mas económica y con un gusto más dulce. Esta bebida siempre ha sido una bebida relacionada con los festejos especialmente en otoño e invierno que es la temporada de manzanas.

Un poco de historia

Como muchas de las bebidas de antaño su origen es incierto, de lo que si se tiene registro es de que su elaboración era conocida ya en la antigüedad por algunas civilizaciones como los griegos y los romanos, los cuales consumían un vino procedente de la manzana, a la que denominaban sikera en griego y sicera en latín, el cual le dió origen al término actual de sidra; también se sabe que fue reglamentada por Carlomagno y se difundió durante el siglo XII por Normandía y Bretaña en donde gracias al clima adecuado para la producción de manzanas esta suplanto a la cervoise de los galos.

Otro de los registros históricos donde la podemos encontrar es en el Antiguo Testamento, redactado entre los siglos XIII-I antes de Cristo, donde se menciona bebidas alcohólicas que los hebreos elaboraban usando como materia prima cereales o frutas.

Pero fueron los árabes quienes desarrollaron avanzados sistemas agrarios, cultivaron toda clase de manzanas y se aplicaron para lograr que los procesos de producción de sidra fueran cada vez más eficientes. Con el paso del tiempo y las migraciones de los árabes a la península ibérica este proceso llegó a la región Asturiana al norte de España, en donde se perfeccionó el arte de la sidra dándole un toque especial y obsequiándonos una sidra más ácida y burbujeante como la conocemos ahora.

Diferentes tipos de sidra

Existen diferentes tipos de sidra, siendo los más conocidos las:

Sidras dulces: salen directamente al exprimir la manzana después de recogerla, ya que esta no es sometida a proceso de fermentación, carece de alcohol por lo que es una bebida que pueden noble o apta para chicos y grandes.

Sidras de hielo: se obtienen a partir de la fermentación del mosto de manzana congelado naturalmente, estas tiene una mayor concentración de azúcares y gradación alcohólica.

Sidra natural: Esta sidra es muy popular en la parte norte de España y en las regiones vascas de Francia. Adquiere todas sus propiedades al escanciarla, que es una manera de servir la sidra desde una altura considerable para permitir que oxide.

Sidra achampanada o gasificada: la más tradicional en las mesas de Navidad, esta se obtiene sometiendo a la sidra a una fermentación en la botella, potenciando así la gasificación.

Proceso de elaboración de la sidra

Todo comienza con la recolección de las manzanas en óptimas condiciones de maduración, después de la selección de los frutos, estos se trituran con molinos que desgarran las manzanas sin romper las semillas, para luego dejarlas en reposo de dos a cuatro días en el caso de las producciones artesanales, y de 12 a 24 horas en el de las industriales.

El producto de esa maceración o mosto se somete a fermentación a través de levaduras, en el caso de la fermentación alcohólica, y de bacterias lácticas, en el de la fermentación maloláctica. Una vez fermentada la sidra esta pasa por un proceso de filtrado para eliminar residuos de la fermentación y es embotellada.

Producción de sidra en México

En México tenemos importantes productores de sidra, sobre todo en los municipios de Huejotzingo y Zacatlán de las manzanas, en el estado de Puebla donde se produce una variedad criolla de manzana que deriva de la Red Delicious, cuyo sabor es un tanto ácido recién cortada, pero dulce una vez que termina de madurar, la característica principal de esta sidra es su dulce sabor.