Las crepas siempre son una muy buena alternativa para comer algo diferente que podemos adaptar a nuestros gustos. Si las crepas más tradicionales son azucaradas y se suelen comer de postre, existen muchas alternativas de crepas saladas. Son una buena idea para un desayuno, comida o una cena, y sobre todo para esta temporada en la que celebraremos el Día de San Valentín.
Hoy proponemos una receta muy sencilla de crepas gratinadas rellenas de espinacas. Son una manera muy buena de iniciar una comida o como platillo principal junto con una ensalada de hojas verdes por ejemplo. Las puedes preparar con anticipación y poner a gratinar justo antes de servir.
Ingredientes
- Espinacas 400 g
- Cebolla blanca 1
- Diente de ajo 1
- Mozzarella 100 g
- Queso Gruyere 150 g
- Leche 250 ml
- Huevo 3
- Harina 200 g
- Aceite de oliva 15 ml
- Sal
- Pimienta negra molida
Cómo hacer crepas rellenas de espinacas
- Tiempo total 40 m
- Elaboración 30 m
- Cocción 10 m
Vamos a preparar primero las crepas y para esto mezclamos harina, leche y huevos en un cuenco. Batimos por unos minutos hasta que ya no haya grumos. Calentamos un sartén en que vertemos el equivalente de un cucharón sopero de masa. Doramos cada crepa por unos tres minutos de cada lado, a fuego medio.
Ahora que tenemos las crepas listas vamos a preparar el relleno picando la cebolla y el diente de ajo. Enjuagamos las hojas de espinacas que cortamos en trozos. Sofreímos primero el diente de ajo por un minuto y enseguida la cebolla por unos tres minutos adicionales, a fuego medio. Luego añadimos las espinacas, la crema, sal y pimienta. Dejamos en la lumbre, siempre a intensidad media, por unos cinco minutos. Rellenamos las crepas colocando una porción de espinacas en uno de los cuarto de cada crepa junto con un poco de queso mozzarella. Las doblamos y colocamos en un plato para horno o refractario. Recubrimos finalmente las crepas con el queso gruyere rallado. Horneamos, a 160ºC, por unos cinco minutos, tan solo para que gratine el queso.
Con qué acompañar las crepas rellenas de espinacas
Las crepas gratinadas rellenas de espinacas son perfecta para la comida o la cena y se deben de servir caliente. Las puedes acompañar de una ensalada de hojas verdes o comer solas con un pan de centeno caliente. Así mismo una copa de vino blanco seco bien frío combinará muy bien con los sabores de esta receta.
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