Y seguimos enumerando los platillos tradicionales mexicanos que suelen engalanar las mesas en las noches mexicanas. Es poco probable que mencione a todos los platillos considerados una tradición en nuestro México, pero los invito a que mencionen los que les gusta comer estas fechas, que para muchos no son de festejo, pero que a muchos nos encanta festejar de una forma u otra, aunque sea para burlarnos de nuestra política mexicana o para olvidarla.
Carnitas
Desde Michoacán, las carnitas han invadido casi toda la república, ¿Quien no ha comido unas ricas carnitas con su salsa, su cilantro y su cebolla picada?. Si tienen la suerte de poder viajar, vayan a Quiroga, o a Uruapan, en Michoacán, para comerlas en el mercado, acompañadas de sus chiles en vinagre y tortillas de comal como se han comido desde antes de alcanzar la fama que las han convertido en platillo internacional.
La barbacoa
Barbacoa. La que se hace en un hoyo, la de borrego, envuelta en hojas de maguey, la que hace un consomé con sus jugos y verduras como los garbanzos, que resulta un "vuelve a la vida" maravilloso. Esa barbacoa, es de la que hablo, la de las zonas centro de nuestro País. En verdad, no puedo creer que hace años, no me hacían comer ninguno de estos platillos, por la grasa, porque son carnes rojas, porque engordan... ¡Que bárbara! Años de despreciar lo mejor de nuestra cocina. La barbacoa, está entre mis platillos favoritos para una gran fiesta mexicana, acompañada, por supuesto, con tortillas de comal y su salsa borracha. Y no desprecien la pansa rellena, seca, con verduras y servida aparte o a un lado de la barbacoa. ¡Quiero!
Los pozoles
O ¿Qué tal uno de los variados pozoles que se consumen en la república? Ya sea de cerdo, pollo, camarón o vegetariano, un buen pozole, puede ser el platillo estrella, y es simple para servir, económico, rendidor y para dar gusto a todos. Aquí si ni imagen les pongo, porque no encuentro fotografía que haga justicia a tantos tan ricos como diferentes pozoles que he comido y los que me falta probar.
Tortas
Aquí menciono, la torta ahogada, estilo Guadalajara, rellena con carnitas. bañada en dos salsas, la de jitomate, que no pica, pero que tiene un olor y sabor inconfundible, y la picante, que muchas personas piden en unas gotas apenas, por su grado de picor, y muchos, como yo, pedimos tan ahogadas en esta, que ya no puedan ser resucitads. Es un platillo que seguramente será del agrado de muchos, máxime si la salsa picante se deja aprte para que se ponga al gusto de cada quien. Ya saben que en tortas y colores, existen gustos y combinaciones casi infinitas.
Las tostadas
Ya sea de lomo, de costillas doradas, de pata, de cueritos, de frijoles y queso, con jamón, pollo o lo que gusten untar en estas tortillas doradas, algunas veces fritas, otras tostadas en las brazas, hacen de este frágil platillo, una delicia. Y digo frágil, porque una vez que les ponen todos los ingredientes que llevan, ¡Cuidado al morder! Porque se nos puede partir en dos o más pedazos y quedarnos sin nuestro rico antojito. Así que, hagamos como los expertos, levantemos el plato con una mano, hasta cierta altura de la boca, y con la otra, damos la mordida.
Recuerden que estas fechas, la dieta, no se recuerda, se olvida, como en tantas otras festividades, en las que siempre nos prometemos que "solo este día" pecaré, y sin falta, "mañana reinicio la dieta". ¡Jajajaja!
Como siempre, en Directo al Paladar, les dejo un par de recetas de mis versiones de los antojitos que me gustan. Enchiladas de familia, con carne y en salsa de chiles secos, y una receta de sopitos dulces para acompañar el café. Sopitos de canela y azúcar. No dejen de leer la primera parte de este artículo.
Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com.mx
VER 0 Comentario